Welcome to St Joseph Cursillo Center.
Bienvenidos al Centro de Cursillo San José.
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, ¡De Colores! es grato para mí darles la bienvenida al sitio oficial de nuestro Movimiento de Cursillos de Cristiandad de la Arquidiócesis de Nueva York. Nuestra misión es la de transmitir a Cristo, Quien es el mismo ayer, hoy y siempre, Quien es el Camino, la Verdad, y la Vida. Queremos, por este medio poner en práctica el llamado a SER EVANGELIZADORES. Por ello abrimos esta ventana de comunicación para el diálogo y la experiencia de fe compartida a través de la red.
Suyo en Cristo
P. John Higgins, Director Espiritual
Dear brothers and sisters in Christ, De Colores! it is gratifying for me to welcome you to our official site for the St Joseph Cursillo Center in the Archdiocese of New York. Our mission is to convey Christ, who is the same yesterday, today and forever. Jesus is the Way, the Truth, and the Life. We want to respond to the call to spread the Good News. Therefore, we created this page to communicate and share our experiences of faith.
Sincerely yours,
Rev. John Higgins, Spiritual Director
Oración del Dirigente
Haz, Señor, que comprendamos
la necesidad de que nuestra obra tenga
más profundidad que superficie.
Convéncenos de que los programas vistosos
no constituyen el éxito.
Dios mío, multiplica las almas abnegadas
que saben sacrificarlo todo a tu causa:
su tiempo, sus facultades, su salud, y aún su vida,
si ello es preciso; infúndeles audacia en las iniciativas,
acierto en la elección de los medios y aquella tenacidad
que, a despecho de lo fracasos, asegura el triunfo.
Aleja de ellas las rivalidades mezquinas,
las susceptibilidades, las vanidades, las asperezas
y todo cuanto distrae de la idea de Dios,
todo cuanto divide y desalienta.
Conserva bien elevado el sentido de lo sobrenatural
y muy efusiva la caridad mutua. Que cada cual
busque con preferencia las tareas más ingratas
y se alegre del bien realizado por los demás.
Que, en todas esas almas unidas para un fin común,
haya una sola alma: ¡la tuya Jesús!, Y que esta alma
permita reconocer en todos los rostros tu bondad atrayente,
en todas las palabras tu acento conmovedor,
y en el conjunto de su obra algo que
sea superior al mundo, algo que proclame tu acción.